Bueno... Les comparto este nuevo poema de tantos que he hecho últimamente, antes de irme a dormir y despertar muy temprano a doblar turno en un trabajo al que tanto detesto. ¡Saludos!
Ella no me ama como yo la amo;
Profundamente, con el alma;
Aún sin corresponderla en el amor;
Sigo esperando su llamada.
La amo, aún sin ser correspondido;
Aún sigo soñando, anhelando el pasado;
Ya no hay vuelta atrás y eso me tiene herido;
¡Cuánto dolor existe al estar enamorado!
La amo, así esté loca de atar;
La aprecio, la valoro aún cuando gobierna el enojo;
La sigo teniendo en su altar;
¡Vaya sentir que se niega a este despojo!
Aún me excita ver sus fotos;
Me alegra haberla conocido;
Aún la amo, ella es mi todo;
Aunque... Su sentir de amistad efímera me tiene dolido.
Extraño cuando correspondía con otro sentir;
Cuando los sueños acariciaban la realidad;
Cuando cada palabra suya daba un grandioso vivir;
La senectud de este frágil enamoramiento abatió la felicidad.
Extraño hasta sus ¡Hola! en su idioma de origen eslavo;
La extraño tanto como aquella relación que se quedó en el pasado;
Aún de ella sigo siendo esclavo;
A pesar de que el Universo jamás estuvo de mi lado.
Aún la amo,
Aún extraño a esa mujer rusa;
El cruel destino fue a contramano;
Y aún cuando su amor por mí ya murió, mi alma sigue con una fe desgastada e ilusa.
Extraño hasta sus ¡Hola! en su idioma de origen eslavo;
La extraño tanto como aquella relación que se quedó en el pasado;
Aún de ella sigo siendo esclavo;
A pesar de que el Universo jamás estuvo de mi lado.
Aún la amo,
Aún extraño a esa mujer rusa;
El cruel destino fue a contramano;
Y aún cuando su amor por mí ya murió, mi alma sigue con una fe desgastada e ilusa.