Lo escribí en el año 2014, pero es muy presente para la vida actual... Quizás deba actualizarme en el sentir de cada poema.
Decías que me amabas con frenesí;
Ahora soy el olvido de tu sentir;
Tus eternas promesas se enterraron en mí;
Muere ese sueño que ha hecho vivir.
Decías que me respetabas, que me querías;
Decías que yo era diferente, único para ti;
Los hechos destrozaron las ilusiones de los demás días;
Este sentimiento fue en vano, no volverá aquí.
Decías que me ibas a ser leal;
Decías que el momento iba a ser ideal;
Las circunstancias impidieron que esto fuese real.
El deseo fallece por la crudeza de tu orgullo feral.
Decías todo, te convertiste en nada;
Lo que sentía por ti se convirtió en un recuerdo;
Esta experiencia, sufrida y malaventurada;
Incrédula de este hecho enfermo.
El tiempo y espacio determinaban tu partida;
El fin de este ciclo fue un acto perverso;
Siento energía macabra, no deja alentar mi vida;
Tu adiós, fue el caos que dolió el yugo de este sentimiento
sincero.
Decías tener ánimos de conocerme;
Decías poseer ánimos de amarme;
Tus promesas se fueron, tus mentiras me dejaron inerte;
Destrozaste la embarcación utópica que anhelaba conquistarte.
Decías todo, pero te fuiste de la nada;
Esperaba todo de la decadente sociedad, pero no de ti;
Fuiste mi inspiración, aquella belleza de noche arriesgada;
Esta agonía asesina lentamente lo que alguna vez sentí.
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